Danger Noodle
El partido de Vini es un drama absoluto, hombre. ¡Cuántas contras han acabado en sus piernas hoy, madre mía! Con otro jugador el partido acaba en 1-4. Es que no creo que haya tomado una sola buena decisión en todo el partido; su defensa es tan pasiva que Xabi ha puesto a Fran García fuera de puesto. Rodrygo tiene que empezar sí o sí el próximo partido. Y los dos tienen que rotar mucho.
Mbappé (y Arda) no son suficientes para ganar títulos; necesitamos un tercer jugador contribuyendo a un alto nivel (ojalá Jude), especialmente viendo cómo nos dan un robo por partido en esta liga de mierda.
El trabajo psicológico y propagandista de construir al Madrid como el equipo del estado/club beneficiado durante décadas hace que los árbitros (en el mejor de los casos) estén claramente predispuestos a demostrar su valentía/honradez contra el Madrid, más que contra cualquier otro equipo.
O sea, que si quieres demostrar que eres de verdad un árbitro serio, tienes que joder al Madrid. Este es el mensaje subliminal que está en la cabeza de todos estos hijoputas. Por eso sientes que vienen con ganas de joder. El partido del Madrid es de lejos el partido de la temporada para ellos. Tanto que ni siquiera el mayor escándalo del fútbol español, que es el caso Negreira, haya alterado mucho las percepciones.
El Socio
Este Gil Marrano es un buen sicario, el robo de ayer sólo te lo perpetra un psicópata de los que duermen como un bebé después de despedazar a una colegiala con un serrucho y congelar los trozos envasados al vacío. Una cosa admirable de «el método» es la instantaneidad de las decisiones, ni el Nesquik, oiga: cada vez que el Madrid mete un gol llega el CSI Negreira a inspeccionar hasta las briznas del césped a ver si pueden aferrarse a la excusa más peregrina para anularlo, pero si es para pitarle un penalti o expulsarle a alguien, todo se resuelve en un segundo. «¡¡Roja clarísima, que lo he visto!!»
Hay que pedirle a Julaisen, eso sí, que se deje de esas manitas maricas tan aprovechables por los criminales del silbato; si te ganan la carrera, te jodes, por más que otros equipos sí puedan practicar esos juegos de manos a la sombra de un cine de romanos. Hablando de manos, en la de Carajal por lo visto el criterio sigue siendo que un buen defensor debe serrarse los brazos (quizá Marrano pueda ayudarle con eso). Anoeta asistía impasible a los crímenes, claro; costumbre no les falta.
La gente ha decidido que ahora ama a Mepajeé, lo cual es un simpático indicador de las increíblemente caprichosas filias y fobias del fútbol; el mismo jugador es adorado y vilipendiado no por sus cualidades intrínsecas, sino por un momento de forma concreto. El muchacho tiene 26 años, deberían quedarle unos tres en su pico; vamos a intentar disfrutarlo ya que cobra tantos dineros y costó tanto sacarlo de aquel crisol multicultural, por más que algunos sigan con la tontuna de llamarlo gafe.
Xabi ha cambiado algo, es un entrenador de fútbol, especie extremadamente rara en estos tiempos de Guartrolas, Ten Haagues, Angelotis y FlicFlocs, todos tan insustanciales o tan sospechosos. Hay que esperar sinceramente que logre convencer a sus mastuerzos de la importancia de currar pese a ser multimillonarios y poder follarse lo que quieran; ese y no otro es el gran desafío de cualquier DT. Si lo logra, será algo parecido al caudillo que el Madrid echa en falta desde Mourinho. Por cierto, al final se acercó a avergonzar a Gil Marrano, bien.
🚨 »Jesús, yo no quiero, pero me hacéis pensar mal, tío».
Xabi Alonso. #DeportePlus pic.twitter.com/KXobFldJvQ
— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) September 13, 2025
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– Sociedad Plebeya: 1
– Real Madrid: 2 (Mepajeé y Niñopajas)