Bueno, no es que sea una enorme sorpresa, pero el bueno de CR7 se ha llevado nuestro prestigioso galardón por tercera vez consecutiva. Sin duda, un gran consuelo por no ganar la Bota de Oro este año. El portugués ha quedado en lo más alto, ¿pero cómo le fue al resto de los jugadores este año? Vamos a analizar sus calificaciones, a modo de evaluación de la plantilla.
Los suspendidos
Carvalho – 2,68. Calamitosa campaña del veterano central, que mostró su peor cara: la del futbolista que desconecta cuando siente que no tiene un papel importante. Parado varios meses por una supuesta lesión, existen fuertes indicios para dudar de su profesionalidad. Para colmo, Mourinho se equivocó por completo alineándolo frente al Barcelona y lo hundió aún más. Triste salida para un jugador que aportó mucho en su primer año, aunque realmente él se lo ha buscado. Su nota lo convierte en el Peor Jugador Madridista del 2012.
Kaká – 2,97. El año de la confirmación. Quiero decir, de la confirmación de que jamás será un jugador importante en el Madrid. Ésta ha sido la campaña en la que las lesiones lo han respetado más, y quién sabe si jugando todo su juego habría llegado a renacer, pero Mou no tenía motivos para sentar a Özil en su favor (ni podía permitírselo). Con todo, ha gozado de bastantes minutos, pero sólo se han visto destellos del que fuera Balón de Oro. Un fichaje fallido en toda regla, cuyo coste ahora sólo podemos aspirar a mitigar vía moros manirrotos.
Lass – 3,04. Jugador cuya consideración decrece campaña tras campaña. Futbolista polivalente pero demasiado individualista y anárquico, que no convence en ninguna posición excepto quizá como lateral derecho. Además, es muy insociable y perjudica la dinámica del grupo. Su ciclo está agotado, y lo mejor sería buscarle salida por un precio aceptable.
Altintop – 3,7. Tuvo una grave lesión nada más llegar y ahí básicamente acabó su historia, con una participación poco menos que marginal. Seguramente no fue petición del entrenador, y aunque probablemente sea un futbolista útil, la sensación es que no entra en los planes de futuro. Si se va no será una sorpresa.
Casillas – 3,72. Una nota, obviamente, que sólo se le va a dar en Fans del Madrid. A mi juicio ha cuajado una campaña muy similar a todas las de su carrera, con las consabidas «paradas milagrosas». El problema es que es el mismo portero desde hace 13 campañas y sus carencias suponen un lastre en los choques de superélite (cuartos de Champions en adelante). Además, la acumulación de años como titular, con el consiguiente cansancio en el aficionado, hacen que ése se muestre menos condescendiente. Con todo, el gran motivo de la nota recibida es su palpable distanciamiento con las causas madridista y mourinhista, que le producen una escasísima motivación. El de Móstoles considera a «la Roja» su verdadero equipo, y se lleva mejor con los enemigos barcelonistas que con sus propios compañeros de club. Esto supone un grave problema, cuya solución aún no se adivina.
Albiol – 4,19. Correcto central cuya suplencia pasaría totalmente desapercibida si no hubiera estado haciendo bulto en la selección española campeona. Con Ramos, Pepe e incluso Varane por delante, su papel natural es el de secundario. Quizá se habría llevado un aprobado si la puta prensa no hubiera estado desestabilizando a cuenta de sus suplencias y las supuestas humillaciones que ha sufrido.
Sahin – 4,25. Gran desilusión, envuelta además en el misterio. Llegó con el alta médica y se lesionó entrenando, para volver a romperse tras completar la recuperación. Por desgracia habíamos recibido a un jugador de rodillas frágiles. Todo el mundo esperaba que se le usara intensamente en el segundo tramo de la temporada, pero al parecer la readaptación al juego le resultó muy costosa (aún sentía dolor), y se diría que alguna otra cosa de él no le ha gustado a Mourinho. Su participación ha sido simbólica, pero casi todos esperamos aún al futbolista que deslumbró en Alemania.
Adán 4,57. Como todos los porteros suplentes de los últimos años, apenas ha disputado minutos, pese a lo cual tuvo alguna cagada notoria. Cansado de calentar banquillo, todo indica que se marchará, para demostrar que puede ser el paquete titular en cualquier equipo de medio pelo. De ser así, la elección de su sustituto resultará fascinante.
Los aprobados
Granero – 6,28. Ha costado mucho, parecía que nunca lo lograríamos, pero al final le han salido pelillos en los huevos a Granero. Bien es cierto que por necesidad ante la ausencia de Sahin y con cuentagotas, pero Mourinho ha conseguido hacer un jugador útil del muchacho. De momento parece haberse ganado la continuidad, y el año que viene tendrá una ocasión de oro para confirmarse.
Coentrao – 6,42. Si algún presunto madridista critica con saña a Coentrao, no falla, es un auténtico cretino. Tras estar quejándonos amargamente de la falta de un refresco para Marcelo, llega uno que además puede ayudar en otras zonas del campo, y nos dedicamos a quejarnos de su precio, que está en la línea de casi todos los jugadores que han salido de Portugal. Pese a las presiones, campaña más que correcta de un jugador cuya aportación crecerá el año que viene.
Arbeloa – 6,60. Eternamente cumplidor, eternamente cuestionado. Su nota refleja que el lateral derecho siempre estará bien cubierto con él, pero que eso en el Madrid no suele ser suficiente. Se echa de menos un jugador con más penetración y salida de balón, y por ello habrá un fichaje para ese puesto. Su peor momento fue cuando hizo un anuncio de Gillette con el puto Busquets, demostrando que ningún jugador ha interiorizado realmente la guerra contra los culerdos.
Marcelo – 6,65. Gran caída en la calificación, sobre todo por sus dos bajones en el juego, a principio de campaña y después de Navidad. El problema de Marcelo es que no tiene un comportamiento profesional en las vacaciones, y vuelve siempre con sobrepeso. Hay que darle un serio toque de atención, y si lo ignora pasará aún más tiempo en el banquillo. Por lo demás, ha tendo momentos realmente brillantes, igual que el año pasado.
Alonso – 6,97. El tópico dice que en el Madrid nunca hemos visto al mejor Alonso, pero que no hay otro jugador de sus características. Como no se me ocurre una descripción mejor, ahí lo dejo. Éste es uno de los jugadores que más pecan de confraternización con el enemigo (el famoso anuncio de las gulas), y por eso le cuesta conectar con el fansismo. Se fichará gente en su puesto sí o sí.
Los notables
Di María – 7,01. Campaña marcada por las lesiones, poco menos que inevitables porque jugó hasta las pachangas con Argentina. Nunca podremos dejar de agradecer a los seleccionadores nacionales su comportamiento tan responsable y respetuoso con la salud de los futbolistas. Cuando volvió a final de campaña no estaba aún plenamente recuperado, pero hoy por hoy es clave en el esquema.
Varane – 7,21. Zidane acertó con este jovenzuelo más que desconocido procedente del Lille, que encantó a todos cada vez que salió al campo. Incluso hay quien ha reporchado a Mourinho no utilizarlo más pese a su juventud. Un jugadorazo en ciernes, que puede aportarnos mucho la temporada que viene.
Callejón – 7,4. La cantera existe. En vez de llorarle a sus amiguitos de la prensa, Callejón se ha dedicado a aprovechar sus oportunidades. Aportando presión, desborde y gol, es un jugador de complemento perfecto. Y ahora además se ha cortado el pelo, así que los hemos hecho un onvre. Sólo cabe reprocharle una cierta relajación cuando empezó a hacerse habitual en el equipo.
Higuaín – 7,56. Otra buena campaña del Pipa, haciendo gala nuevamente de su tremenda eficacia goleadora. Sus únicas carencias son el juego aéreo y su poca aportación cuando no le llegan balones claros. En una plantilla llena de cracks ofensivos, ha gozado de un gran número de minutos, así que difícilmente se entienden sus quejas. Pese a ello, está decidido a irse, pero sólo lo dejaremos ir por una millonada.
Kherida – 7,67. Campaña de confirmación del alemán, uno de nuestros pocos centrocampistas fiables. Digan lo que digan de él, en sus ausencias el equipo casi siempre sufrió, y marcó un gol fundamental en Barcelona. Seguirá siendo clave los próximos años.
Ramos – 7,7. Durante años y años la canallesca lo etiquetaba como un lateral de élite, mientras el madridismo underground decía que era una calamidad en ese puesto y que debía jugar de central. Hete aquí que, sorpresa, pasó al centro de la defensa y cuajó su primera campaña realmente notable. Cosas. Debe corregir errores garrafales que comete puntualmente.
Özil – 8,30. Nuevamente temporada de lujo de Ojitos, uno de los cinco mejores jugadores del mundo a nivel técnico. Se comió con patatas a Kaká. Tan sólo le falta acabar de curtirse físicamente y ser regular toda la temporada; este año tuvo un bajón tras romper con su zorrita Aída Yespica. Esperemos que eso le enseñe que a ciertas edades no puedes juntarte con lobas divorciadas.
El Top 3
Pepe – 8,50. Tras sufrir una brutal campaña mediática el año pasado, este curso lo han dejado más tranquilo y ha podido brillar en los momentos álgidos de la temporada. Este jugador tiene un serio problema con su gestualidad y el control de su temperamento, pero por lo demás nadie puede negarle su condición de central de superélite.
Benzema – 8,84. La temporada en la que explotó definitivamente y se sacudió las reservas del ignorante y aborregado público del Bernabéu. Si algo ha salvado a Benzema es lo estético de su fútbol, que acaba penetrando incluso en las mentes más obtusas. Lo fundamental de su juego es que mejora casi todos los balones que le llegan gracias a una gran técnica y visión. Pero no hay que ser demasiado indulgentes con él: aún vacila demasiado en la definición, y eso nos cuesta desperdiciar jugadas claras. Si realmente quiere aspirar al Balón de Oro, debe demostrar mucha más hambre goleadora.
Cristiano Ronaldo – 9,55. Campaña simplemente brutal, irreprochable. Quizá la única duda que quedaba con Cristiano es si podía ser un auténtico líder y emerger en los momentos más comprometidos. Este año lo ha demostrado sobradamente, y sería injusto responsabilizarlo de la caída en Champions. Nos dejó goles maravillosos, algunos casi irrepetibles, como el inverosímil tiro con efecto contra el Levante, salido directamente de un anime. Increíblemente, sus 46 tantos en Liga no le darán la Bota de Oro, pero todos sabemos que si hubiera metido 50 Messi tendría 55 (es tan fácil como pitar un penalti tras otro). A poco bien que lo haga en la Eurocopa, deberá llevarse el Balón de Oro.