La Liga, los derechos y Asia

¡Hola Marquistas! El Madrid y el Farsa, primeros clasificados de la Liga española (ni BBVA ni hostias) han acumulado hasta ahora 74 puntos, dejando al tercer equipo, el Violencia, a nada menos que 21 puntos, y el cuarto a XX. El año pasado el primero le sacó  9 puntos al segundo, 17 puntos al tercero y  27 al cuarto. Emoción hasta el final, vaya, y la cosa no tiene pinta de ir a cambiar en el próximo lustro. Los dos grandes aumentan sus ingresos exponencialmente, mientras que los otros van para abajo o directamente nunca fueron gran cosa. En el primer caso está el Valencia, al que iba a salvar Inversiones Dalport (Asia & Europa & América &…), con un capital social de 40 euros y 28 céntimos, que luego ha sobrevivido con un crédito más que cuestionable de la Comunidad y que este verano tendrá que vender jugadores sí o sí; en el segundo caso, el Sevilla, que sueña con ser alternativa de poder cuando el fichaje más caro de su historia ha sido… Negredo, por 14 millones de euros. El ingenio, el trabajo y los Monchis sólo dan de sí hasta cierto punto.

Y yo no quiero una Liga mierdosa. Porque es aburrido y porque nos perjudica. Devalúa el título y además nos debilita competitivamente. Nuestro Madrid sufre porque «compite» semana tras semana con equipos que, aunque militan en la misma división, no están de facto en la misma categoría. Cuando nos encontramos contra los punteros de otros países lo pasamos mal, y no necesariamente por ser peores, sino por carecer de la adecuada tensión competitiva. ¿Cómo es posible que un jugador que llega de la Premier como Lass Diarrá sea un titán durante los primeros meses principalmente gracias al ritmo físico adquirido allí? Hablé en una entrada anterior del peligro de que la Liga española se convierta en un trasunto de la escocesa, y el riesgo es cada vez más patente. ¿Pensáis que la Liga no puede perder su importancia? Hubo un tiempo en que la Copa era con diferencia el título más prestigioso del país, y ahora es un premio de consolación para equipos de segunda.

En lugar de sacar pecho y decir que las diferencias se producen «porque somos la hostia», es necesario tomar medidas ya. Y aquí el meollo está en el dinero. Obviamente no nos vamos a poner a repartir pasta, ni a renunciar a ninguno de los ingresos que generamos exclusivamente por nuestra imagen y proyección mundial. Pero sí hay que plantearse de inmediato el reparto de los ingresos generados por actividades compartidas: en román paladino, el dinero de las retransmisiones de la Liga. Sí, ya sé que somos la principal atracción, los que tienen más audiencia y bla bla bla, pero en definitiva este es un circo colectivo: sin los Valencia, Sporting, Racing de Santander, Deportivo o Mallorca no hay Liga que valga. Y mientras nosotros podamos gastarnos 100 millones cada año y un equipo medio de la tabla se gaste, con suerte, 15, la desigualdad jamás se reducirá. No digo yo que nosotros tengamos que ponernos un tope, pero firmando un contrato colectivo quizá un Mallorca pueda gastarse 30 millones en un verano sin que por eso se hunda su economía (¡siempre que esté bien gestionado, por supuesto!).


Toda esta gente quiere ver al Madrid.

Pero para plantearse esto esto hay que cambiar las reglas. Negociación colectiva, vale, pero siempre que se nos permita explotar al máximo nuestro potencial comercial. No puede, no debe ser, que los horarios del Real Madrid, el club más importante de la historia, los decida un oscuro ejecutivo de una empresa que odia cualquier cosa que tenga que ver con España (menos el Mundial, cuando les parecía rentable). Si hay que esperar a que se extinga el calamitoso contrato con Mediapro, se espera, aunque lo ideal sería renegociarlo, o que algún otro emporio les comprara los derechos, librándoles de la incertidumbre de si podrán rentabilizarlos. Lo que necesita el club desde ya es libertad absoluta para fijar sus horarios, obviamente con la vista puesta en el mercado asiático. Si los chinos quieren Real Madrid, vamos a darles Real Madrid. Imaginemos que pudiéramos ingresar un 15 o un 20% más por televisión. Entonces la idea de repartir con los demás clubes no parecería tan terrible, ¡incluso podríamos ganar más que ahora una vez realizado el reparto!

Sí, no me olvido de la vieja idea de segregarnos de la Liga e integrarnos en una Superliga europea, pero sinceramente dudo que Florentino vaya a planteárselo nunca en serio. Eso sería poner patas arriba y en la práctica destruir el actual orden futbolístico europeo, sin que nadie pudiera garantizar el resultado, y Floren es un hombre demasiado prudente para embarcarse en algo así. El futuro a corto plazo es evitar la Liga española se convierta en una especie de torneo de exhibición para los dos saurios de la competición, y cuyo campeón se decide en los dos superderbis anuales. El modelo de la Premier se basa en la negociación colectiva, y llevan tiempo siendo la Liga líder del mundo, por muchas pajas que se hagan los voceros de la Sexta. Reflexionemos sobre los motivos.

Una de historietas

Miguel Carmona, alias Yui, es un estupendo artista gráfico madrileño con un grave problema: es del Paleti. ¡Y encima le gusta serlo! No obstante, también gusta de leer Fans del Madrid, hasta el punto de que se ha arrancado a hacer una tira exclusiva para este nuestro blog. En ella propone su método para pasar de octavos en la Champions de una puñetera vez: ni entrenador estrella, ni cracks, ni proyecto ni pollas: ¡¡Florentinéitor!! Podéis ver más trabajos de Miguel en su web, yuiarts.com. A ver si se anima a hacernos nuevas historietas.


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El siguiente cómic está firmado por Pallarés, colaborador habitual del semanario progre-humorísitco (cada vez más de lo primero y menos de lo segundo) El Jueves, y creador del personaje Baldomero. En esta historieta vemos nada menos que la hipotética Catalonia independiente presidida por Juan Lapuerca. Aparte de ser bastante divertida, lo que más llama la atención de ella es que tiene muy, muy pocas diferencias con lo que sería la realidad si esto llegara a ocurrir. Sobre todo la parte del Borbón.


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Hablar de historieta futbolística es hablar de Quim Pons y su Triturado. Este montaje no es un cómic, sino uno de sus famosos carteles de cine, de nuevo con Cerdaño y el Villarato como protagonistas. Lo único que cabría reprocharle es que quizá ha sacado al director de Asco demasiado delgado. Este otro montaje, a cuento de la fiebre por el pequeñajo del Barsa, está bastante logrado también. Por cierto, Quim está preparando una cosa bastante chula creada especialmente para el blog (y sus participantes más habituales), que podréis ver en los próximos días.

Y ahora el montaje más cachondo del día, el de una web satírica que ha convertido a Retarded Messi nada menos que en Supermán, a cuento de la coñita esa del «mejor de la historia». Incluso se han currado un artículo de páginas interiores en el que se afirma que el único jugador que admite «cierta comparación» con él es Pelé, porque rindió más con la selección (como tres Mundiales más). Je je, qué cracks, ¿os imagináis ver semejante bacalada en un verdadero diario de tirada nacional? Oh, espera un momento… ¡¿Pero qué coj…?!

El resurgir de Mou


Tan ricamente.

Decepcionante encuentro en el Estadio de los Emiratos Moros, donde un Arsenal demasiado pacato y mermado dejaba hacer casi a su antojo al Vitaminas CF, que de nuevo rindió a gran nivel gracias a sus innovadores métodos de entrenamiento. Al final los cañoneros lograron rascar un empate, con algo de suerte y gracias sobre todo al extremo Leo Walcott (Bueno. Fichar.), pero lo cierto es que tienen la eliminatoria cuesta arriba. Sex se hizo la pierna migas simplemente por rematar fuerte un penalti (quienes quieran ficharle tendrán que valorar seriamente su condición física), Arshavin está renqueante (parece que discutió con Yulia hace poco y se llevó la peor parte), y resulta difícil imaginar a los jovenzuelos de Wenger llevándose el partido del Kampf Nou.

Así pues, ¿quién puede enfrenarse al mal? Erigiéndose en la primera línea de defensa estará José Mourinho, el gran Mou. Ayer su Internazionale Milano hizo probablemente el mejor partido de la temporada, jugando por fin a algo reconocible y asediando insistentemente el área del Cheska; nos llegaron lejanos ecos de aquel Chelsea auténticamente intimidador. Incluso sin el concurso de Balotelli, apartado del equipo por su conflicto con Mou, los Sneijder, Pandev, Milito, Eto’o… lograron hilar un juego ofensivo muy peligroso para cualquier equipo de Europa. Atrás, solidez total, con un líder como Walter Samuel al que echaron de cierto equipo español «porque era muy malo». Sólo la extraordinaria actuación del meta Akinfeev impidió que el Inter marcara uno o dos goles más. A los que repiten como loritos que cierto tipo de Móstoles es «el mejor portero del mundo» habría que ponerles vídeos de Julio César y de este ruso de sólo 23 años, candidato ideal junto con De Gea para nuestra portería, en ese universo paralelo en el que Barbillas no es una especie de santo laico e ídolo incuestionable de todos los canis, chonis y marujas de la nación.

Si la semifinal acaba siendo un Farsa-Inter, estoy seguro de que par alos culerdos será su partido más difícil desde los dos que jugaron contra el Chelsea el año pasado. Mou no sólo arma equipos duros como rocas, sino que también usa su personalidad para empujar, algo que asusta mucho a los mediocres de todo pelaje, como Fernando Burgos, que se despachó a gusto en Telemadid con el portugés («ahí está con su típico caminar tan chulesco»). Supongo que Mourinho no debe estar muy por la labor de dejarse ganar por un tipo que estuvo a sus órdenes, y que después de todo no es más que un novatillo comparado con él. No sé, me parece que ambos se han declarado amigos, pero dudo que el carácter ladino de Pek agrade a alguien tan franco y directo como Mou. En todo caso es una buena noticia ver a un equipo suyo volver a la primera línea, y habrá que estar muy atentos a ver donde recala, en caso de abandonar el Inter, en el que parece un tanto hastiado por los distintos condicionanstes que encuentra.

Cuarto asalto

No va más en Vistalegre. Está bien eso de haberse dejado ganar un partido para darle emoción a la cosa y pegarse el gustazo de ganar allí, pero creo que la broma ya ha durado bastante. La concentración para esta noche ha de ser del mil por mil, y tenemos que llevar el partido a nuestro terreno, el de los 70 puntos. Todos, entrenador y jugadores, aseguran tener claro su papel, pero eso hay que demostrarlo en la pista de un Vistalegre que de nuevo rebosará. Esta vez se juega a una hora humana, las siete, y es festivo, por lo que todo confluye para la gran comunión de un madridismo que debe ser balcánico por un día.

«Lucharemos como si fuera el último partido de nuestras vidas», ha delcarado Felipe. Muy bien, entonces espero que si tiene que matar, mate, y si tiene que morir, muera. Mariconadas las justas, es decir ninguna. Ganemos o perdamos, que el Regal no olvide nunca lo putas que vamos a hacérselas pasar. Rendirse, nunca. Retroceder, jamás (porque te pitan campo atrás). Imperativo mantener a raya a los gigantones Morris, Mickeal, KingKong y Vázquez, así como al bombardero Lakovic, es decir defender hasta la extenuación. Una vez bajo su canasta, balones a Tomic, Llull o Lavri, para sumar a buen ritmo. Y ojo que creo que Velickovic será importante, aunque Messina dijo que apenas lo usó en el tercer choque «porque su actuación no estaba al nivel del partido». Blando, el tío. Sea como sea, el equipo ya ha ganado brillantemente al Regal, y ahora ha de hacer todo lo posible para repetirlo. Apoyo no le faltará.

Una venganza servida muy fría

10 largos años ha tenido que esperar el Báyan para devolverle a los cerdos mancunianos la amarga decepción de aquella final de Barcelona. El ladino Ferguson llegaba al majestuoso Allianz Arena con todo controlado, o eso pensaba él. «Je, a estos picapedreros alemanes me los ventilo como si fueran una botella de Chivas». Las cosas se le ponían de cara enseguida, con el Bayern defendiendo a balón parado con una rotundidad propia del Real Madrid, y regalando al gordinflas de Rooney el primer gol en el minuto uno. Fergie se relamía: «Jo jo jo, somos un puto rodillo. Esta vez las cosas no se torcerán como el año pasado». Mientras, Louis se mesaba los cabellos en su banquillo: «¡¿Pero cómo coj… hemos encajado ese gol?! ¡¡Mañana van a dar 80 vueltas a Münich rebotando sobre los huevos!!» Y en verdad que el Manchester se estaba creciendo y perdonó el 0-2 en más de una ocasión.

El Bayern por su parte se mostraba como un equipo aseado, pero sin la suficiente mordiente como para hacer pupita. Ribery era el único factor diferencial de los alemanes, tratando de deslumbrar a los contrarios con las cosas esas horribles de plástico que lleva en los pies. Es una mezcla extraña, el club bávaro, once tíos fuertes y disciplinados como los germanos de toda la vida intentando hacer el fútbol triangular y perfecto del holandés de hierro. Llegó el segundo tiempo y seguían resistiendo los alemanes, ¿había aún esperanza? El escocés mascaba chicle confiado. «Con un 0-1 pasan ni con toda la cerveza de toda la puta Oktoberfest«. Pero parece que el fútbol quiere pagarle lo que le debe a Van Gaal, su segunda Champions: en una falta tirada por Ribery de aquella manera, el balón atravesaba la meta de un excelente Van der Sar (no Sir). ¡El Bayern aún tenía vida!

Y cuando estaba el asunto visto para sentencia y todos hacían sus cábalas de clasificación con el 1-1, mi tocayo cogía la pelota y avanzaba como el juggernaut a base de pura potencia, para finalmente caer en las inmediaciones del área. Pero su esfuerzo no sería baldío: un compañero recogería la pelota y se la pasaría a Olic, quien tras un hábil recorte convertía el gol de la victoria en el ultimísimo minuto. Diez años después, Mario Gómez vengaba a Mario Basler. «Shit!!», exclamaba el escocés desde el banquillo. Ahora el Bayern tendrá que defender a muerte su ventaja en Old Trafford. La misión aún es dificilísima, pero ahora tienen la ventaja moral. Además, los equipos no están consiguiendo remontar las derrotas en esta Champions, así que el Bayern podría encontrarse con el inesperado premio de una semifinal. ¿Quizá contra el Vitaminas?

¡¡Madridistas ejemplares!!

26 de Mayo del 2009, José María Gutiérrez (próxima María José, previo «retoque» en Bangkok), hace profesión de amor hacia su club de toda la vida:  «Tengo dos años más de contrato, hasta 2011. Quiero acabar mi carrera deportiva en el Real Madrid, en la elite, pero habrá que ver con el nuevo presidente. Si no quieren que siga, me iré con la cabeza bien alta, pero no voy a perdonar ningún euro porque lo he dado todo por el club». Sí, vamos, una vida de sacrificio y privación la suya. ¿Y qué le ha dado el Madrid a él, eh? ¡¡Sólo ingratitud!! (Y un sueldo que ningún otro club del mundo le habría pagado.)

Un año después, Don Balón publica una notita breve pero jugosa: «El entorno de Raúl y su representante, Ginés Carvajal, lo tienen clarísimo, y así se lo han dejado ver a Jorge Valdano para que se lo transmita a Florentino Pérez. El todavía capitán madridista (…) está dispuesto a marcharse y a no crear problemas. Eso sí, sólo acepta anticipar a este verano su salida del Real Madrid, en el caso de que FP le pague la totalidad de su último año de contrato. Es decir, según los asesores de Raúl, entre ficha, sueldos y primas cerca de 12 millones de euros.» Joder, ¡así yo tampoco doy problemas! La nota está publicada en una sección de confidenciales y sin firma, así que la ponemos en cuarentena, pero me casa perfectamente con todo lo sabido del personaje. Probablemente se trate de un globo sonda de Ginesillo, pero viendo la espectacular reacción de los aficionados de todo pelaje (vean los comentarios aquí) probablemente se la envaine. Y aunque seguirá pidiendo un pastizal para su churumbel, estará algo alejado de esos 12 kilotones que el Mi7o considera se le deben por derecho de nacimiento. Y por madridismo, claro; el inmarcesible madridismo de este hijo de puta.

El silencio de Messina

Si cuando David se enfrentó a Goliat se hubiera tumbado en el suelo rascándose los cojones en lugar de lanzarle el pedrusco, el gigantón se le habría acercado y habría procedido a masticarle los intestinos. Eso mismo hizo ayer el Regal gracias al relajamiento de un Madrid que creyó que con la presión de la grada alcanzaría, y que por muchos puntos que nos metieran bastaría con apretar el acelerador luego. Pues no. Para Messina la base de todo es la defensa, y ese aspecto fue ayer fue un jodido desastre, aquello parecía el bombardeo de Dresden. Obviamente Navarro hizo una visita a su fisioterapeuta antes de venir a Madrid y las  enchufó casi todas. El Madrid planteó muy mal el partido ante un equipo tremendamente superior en físico y tiro, y esto se reflejaba en el rostro de Messina. Al italiano le gusta guardar largos silencios al principio de algunos tiempos muertos, para luego lanzarse a dar instrucciones. Es un reproche mudo, sin duda el que más puede impresionar al jugador. Ayer podíamos permitirnos fallar, pero la lección tiene que estar perfectamente aprendida para el partido del Jueves, en el que simplemente no vale un error más.

Martes de pasión

Se reanuda la eliminatoria de Euroliga ante la Farsa, equipo más conocido por su verdadero nombre, Seguros Regal. El partido es a las nueve y media, una hora estupenda para ir hasta el extremo sur de Madrid, tirarte dos horas en el partido y llegar a tu casa más o menos a la una de la mañana. ¡¡Ahí, creando, afición al basket!! Bueno, por lo menos hay entradas a 20 euros, y a 10 para los socios. Messina afirma que la clave estará en jugar con tranquilidad y confianza, justo lo que le falta al Regal, que llega acongojado, acogotado, ¡¡acojonado!!, después de que nos orináramos en la pista del Palau el otro día, marcando territorio. El más aquejado por este síndrome es Navarro, que desde la Copa del Rey lleva un glorioso promedio en triples de ¡8 sobre 51! Uauh, un crack En Bi Ei. Ricky ya vimos el otro día lo que era, una nenaza, y Fran Vázquez tiene alguna tara, así que como mucho pueden preocupar el triplista italiano ese y los dos negracos, Mickeal (al que los comentaristas se empeñan en llamar «Máiquel») y DingDong, también conocido como Bonifacio, o directamente King Kong. En nuestro bando están casi todos en forma: Llull, Tomic, Prigioni, Jaric, Lavri e incluso un recuperado Velickovic, y la moral está por las nubes. Hablando de perlas del Este, ayer el Macarra publicaba un articulito sobre nuestro canterano más célebre, Mirotic, que está haciendo una discreta campaña en el Palencia. Parece que aún le faltan un par de años para dar el salto a la ACB.

Huelga decir que esta noche hay que animar a muerte, siguiendo la pauta que marque la grada de los jóvenes Berserkers (los antipiperos). Como ganemos será casi imposible que se escape la eliminatoria, ya que el cuarto partido será un auténtico hervidero. Así que hale, todos pendientes del fútbol de canastos, aunque con el rabillo del ojo estéis viendo el partido del que voy a hablar a continuación.

Bayern-Manchester, ¡¡casi nada!!


Es una foto en alta, por si queréis ampliarla y tal.

Un partido con todos los alicientes. A Ferguson le han llamado borracho no sé cuántas veces, pero pese a ser igualmente cierto no suelen llamarle ignorante, calificativo idóneo para un tío que no se cansa de abrir la boca para vomitar mierda y falacias sobre el Madrid.  A este escocés de nariz sonrosada le encanta relacionarnos con Franco (ni puta idea) y acusarnos de robar jugadores, pero cuando se descubrió que el Manchester había robado jóvenes futbolistas con muy malas artes, el cabronazo tuvo que envainársela. Enfrente tendrá a Van Gaal, uno de los técnicos con más cojones del mundo y que nunca ha hablado mal de nuestro club; de hecho, era madridista de pequeñito. El holandés se verá obligado a jugarse la eliminatoria en este partido de casa, ya que ganar en Old Trafford se antoja una tarea hercúlea. Ante todo deberán dejar su portería a cero, y la siguiente prioridas será marcar al menos un gol, para en la vuelta tratar de aguantar el empate. Robben será duda hasta última hora, pero imagino que al menos disputará unos minutos. Con el holandés fuera de combate, la principal baza del Bayern será Quasimodo, que tendrá una ocasión ideal de lucirse. También tendremos la oportunidad de ver a Rooney, que como sabeís está como una moto. A ver qué crack luce más.

No podemos olvidar que esta eliminatoria es una reedición de la celebérrima final de Barcelona, en la que el Bayern de mi tocayo Mario Basler y Hitzfeld perdió el título en un «minuto tonto». Si en los duelos anglo-alemanes siempre saltan chispas, la remembranza de aquella noche convertirá este choque en una puta guerra, ¡¡como debe ser!! Espero que haya alusiones a acontecimientos bélicos, del tipo «¿recuerdas cómo os pateamos el culo en las Ardenas?», o desafíos barriobajeros como «te vas a tragar el té de las cinco con tetera y todo», así será mucho más divertido. Claro que los más sibaritas podrán disfrutar, si lo prefieren, del duelo francés entre el Lyon y el Burdeos de nuestro futurible Blanc, claro favorito para pasar. El Madrid ya no estará en la Champions, pero desde luego quedan muchos partidazos por delante. ¡A ver qué pasa!


«Para tu tía de Birmingham».

Otro derbi, otra victoria

En el fútbol hay tradiciones muy persistentes, tal como comentaba ayer. El Paleti tendrá que esperar hasta el próximo curso para volver a jugar con los mayores, pero al fin y al cabo estamos al principio de la década, ¡que perseveren y quizá algún día se lleven un derbi! Esta vez lo intentaron con mucho ahínco, e incluso llegaron a soñar con la victoria. De hecho, lograron adelantarse a los pocos minutos de juego: Tiago entraba por banda izquierda y se la entregaba a un Kun en la frontal del área que ejercía de crack por única vez en la noche, desviando el balón con un movimiento inverosímil para dejar a Reyes en ventaja para tirar. El gitanillo agradecía el regalo marcando el 0-1, y estallando en una rabia que parecía tener un tanto de resentimiento. Menuda diferencia de un club a otro de la capital, ¿eh, quillo?

Jugaban con gusto los indios en esos primeros compases, tocando con criterio y  ocupando bien los espacios, aunque se notaba que físicamente estaban haciendo un esfuerzo extra. Mi buen amigo indio, con el que estaba viendo el partido en una tasca tras salir de las Ventas, me decía que pronto me arrepentiría de la prepotencia de la entrada de ayer: «Yo quiero que el Madrid gane la Liga, pero… el respeto al contrario es lo primero, chaval». «Terry, el respeto hay que ganárselo en el campo. Es imposible que ganéis». Alegaba Terry que mi identificación de la hinchada rojiblanca con Manolo Esteban era injusta, que muchos atléticos se oponían al imperio culerdo y que deseaban que el Madrid ganara la Liga. «Son muchos más de los que parecen; quizá sólo un 20%, pero no unos pocos marginales ni mucho menos». El Madrid, mientras, seguía aturullado, llegando arriba con regularidad pero bastante horrible en la finalización de las jugadas. Granero trabaja afanosamente para confirmarse como un bluff, y Gaygo se esmeraba para poder asegurar a su familia y al Diego que sigue dedicándose al fútbol.

Sí, Gaygo es el flavor of the month, y se está extendiendo entre el madridismo la especie de que Lass ya no da más de sí y hay que poner a este chico, que teóricamente se entiende mucho mejor con Alonso. Esto es sólo otro símbolo de nuestro histerismo y veletismo, y sin negar que Lass esté mal, no es normal que queramos recuperar ahora un programa que ya estaba en la papelera del Windows, a la espera sólo de que diéramos al botón de «Vaciar». Mi alternativa es que usemos al otro negro, ese que tenía por costumbre ganar Ligas. Alonso por su parte se ha erigido en protagonista absoluto de nuestro medio campo, ya sea para bien o para mal, y en eso que llaman columna vertebral de los equipos él es la parte central. Ah, Floren, que no lo quisiste hace seis temporadas… Casillas sin estar: tuvo una salida surrealista a ras de suelo que bien pudo costar un gol, y es ya un jugador amortizadísimo para el Madrid, aunque obviamente nuestras cabezas pensantes van a ser completamente incapaces de resolver el problema que se avecina con él. La primera parte se cerraba con una defensa inverosímil de Tiago, que le sacaba a Higuaín un balón listo para fusilar a un metro de la línea, y con un fallo clamoroso de Cristiano, incapaz de marcar de cabeza tras recibir totalmente solo.

Los parroquianos del bar daban sus impresiones: un inmigrante ecuatoriano, madridista, declaraba que habíamos «pecado de prepotencia», y que eso nos podía costar la Liga. Un cincuentón le replicaba que si decía eso no tenía orgullo madridista, y que ganábamos seguro. Otro inmigrante, más negruzco y de simpatías culerdas, decía que el Madrid perdería, y luego ante el Barsa «que ganara el mejor». Terry y yo intervinimos también en la animada discusión. Se reanudaba el juego y el Madrid salía decidido a por la victoria, que no tardó en encarrilar. El primer tanto fue obra de Alonso, parecidísimo al que marcó el otro día, rematando en el segundo palo un balón cabeceado por un compañero. ¡Jugada ensayada! El cincuentón celebraba el gol al grito de «¡Viva la República!» Para darle variedad al ambiente, yo exclamé: «¡Viva Franco!». Mi amigo argüía: «Buah, anda que no queda partido, vais a sufrir mucho». Pero yo sabía que el «modo Berserker» del equipo estaba activado y que el Paleti ya no tenía nada que hacer. Cinco minutos después, un sputnik enviado desde su casa con precisión láser por Alonso llegaba a los pies de Arbeloa, que entraba por la banda derecha solo y con toda la ventaja. Al llegar al área se sacó de la manga una finalización extraordinaria, con dos recortes en corto que sentaron a la defensa, colocando la pelota ajustadita al palo largo. Extraordinario gol del dos -seguramente el mejor de su carrera-, sin duda gafado por haber aparecido prominentemente en la entrada de Fans del Madrid previa al partido.

El Paleti se mostraba mucho menos fresco físicamente, y resultaba obvio que ya eran un juguete en manos blancas. El republicano empezó a animarles y a desear que marcaran, alegando: «yo soy un perdedor, voy con los perdedores». En otras palabras, era bastante gilipollas. Cristiano Ronaldo, que estuvo muy participativo como siempre, esta vez se pasó un poco, y con el gol metido entre ceja y ceja se equivocó en varias decisiones. Lanzó dos o tres tiros libres, pero nada se vio de su famosa precisión. Uno que intentó desde cuarenta metros estuvo simplemente de más. Claro que no hizo falta que acertara: los indios habían no hecho aún la típica «jugada Paleti», y Tiago decidió enmendar la carencia. Quizá arrepentido por haberle quitado un gol a Higuaín, decidió darle un pasecito defendiendo en su propia área, como diciendo «toma, métela», lo cual hacía el argentino, obsequioso, un segundo después. Sí, obviamente el gafe de Fans del Madrid era toda una bola de plomo para el equipo.


– Pasádmela siempre, que soy el puto amo.
– ¿Ein?

El resto tenía que haber sido trámite o goleada, pero no se daría así la cosa: defendiendo un saque de corner, Alonso elevaba la mano como un bailarín flamenco por motivos ignotos, regalando al Paleti un penalti -convertido por Forlán- que le daba oxígeno. Bueno, al menos el vasco consiguió cumplir ciclo de tarjetas. Sin embargo, no estaba el rival para remontadas: el resto del partido fue una sucesión de embestidas inútiles con el cuarto gol del Madrid más cerca que el tercero del Paleti. A 15 minutos del final entraba el tábano, demostrando que podía ser igual de penoso e inoperante contra su «equipo fetiche» que contra todos los demás. Tan sólo una ultimísima intentona de Forlán tuvo algo de peligro para nuestra portería, pero por suerte su tiro se estrelló en el lateral de la red. El gafe de este blog, ya se sabe.

El Madrid sigue siendo un equipo victorioso y goleador, pero que continúa con los experimentos a punto de entrar en el mes de Mayo. Los cambios son repugnantemente previsibles, y en general se nota demasiada falta de peso en el banquillo. La victoria ante los culerdos, y por extensión en la Liga, es perfectamente posible, pero los fallos que contra equipos menores son tolerables, en un superderbi pueden resultar mortales de necesidad. Una concentración absoluta y el retorno del negro bueno bien pueden ser las claves para cerrar la temporada llevándonos la Liga.

Dedico esta entrada al subnormal que se hace llamar Perry Mason, desde el cariño.

– Real Madrid: 3 (Alonso, Arbeloa e Higuaín)
– Atlético de Aviación Franquista: 2 (Gitano Reyes y Forlán (pen.))

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